El semental gay Lucas Mancinni adora a los tíos varoniles que huelen bien, y está de enhorabuena con el jefe árabe Fares, que le espera sin camiseta y sudando en chándal. Se encuentran en un sótano y Fares acaba de salir de hacer deporte. No se ha duchado a propósito, porque sabe que a Mancinni le encanta el sabor del alfa. Una explosión de testosterona en sus fosas nasales y, como de costumbre, Fares está seriamente cachondo en ropa deportiva, con su gran polla abultada y sus calcetines blancos recién quitados de las zapatillas. Su aroma natural hace que Mancinni sea más obediente que nunca, y la mirada superpoderosa y directora de Fares, moldeada en su pasamontañas, es un recordatorio directo de a dónde pertenece el culo. Fares ha follado con tías y gays, pero ahora tiene que admitir que este culo está realmente en celo. Mancinni tiene una sed de polla enfermiza, se atiborra de la exquisita polla de Fares y está listo para que le rompan el culo duro. Acabará con la cara llena de semen.