Andolini ha conseguido hacer de Alaidin su nuevo juguete. El ex top se ha convertido en su obediente cumdump y está dispuesto a hacer cualquier cosa para complacerlo. Una palabra y Alaidin corre a buscar a Andolini para que se ocupe de su polla. Adicto a su voz y a sus órdenes, Alaidin no quiere volver atrás, demasiado cachondo para sentir el control verbal del dom sobre él. Andolini se deleita viéndole tan esclavizado, completamente en trance sobre su gran polla, haciendo absolutamente todo lo que le dice. Decide convertirlo en uno de sus mejores esclavos y lo entrena, pidiéndole que demuestre cuánto le pertenece ahora. Cuando no está chupándosela a su jefe con mirada desesperada, Alaidin está siendo follado en serio. El poder de la voz de Andolini no tiene límites.