El barbudo francés Mathieu encuentra a un joven bribón gay sub que viene al aparcamiento para chupársela. Va a conseguir que se la chupe, se corra en su polla y le pida que se trague su propio semen. El sumiso no pudo aguantar la leche mucho tiempo cuando Mathieu le pidió que se corriera en su hermosa polla grande. Y cuando llega el momento de tragarse su propio semen, obedece. Mathieu adora este tipo de chico obediente que dice que si a todo y se deja pervertir. Mientras este buen chico limpia todo va a rociarlo a su vez.