Este guapo hombre llamado Canaillou podría ser tu novio. Todas las mañanas lo verás en tu baño duchándose. Su cuerpo es perfecto, sus genes son los de un deportista que cuida su cuerpo. Se enjabona su gran polla y sus pelotas. Y luego, cuando sale de la ducha, ¡está sencillamente magnífico! Te mira y te pregunta: "¿Quieres mi zumo otra vez esta mañana?". Por supuesto que sí. Te pones de rodillas, admiras su paja y esperas a que escupa su semen en tu boca.