De vez en cuando Tex necesita una emoción. Un tipo que sepa ponerlo en su sitio, romper su espíritu y tratarlo como una perra. El tipo de juego que tanto le gusta a Kad el argelino. Por supuesto, el matrimonio entre los dos se da por supuesto y este botín funciona a la perfección. Tex es totalmente perra y sirve la gran polla árabe con mucha energía, mientras que Kad folla como un loco el culo de este tipo sexy, viril y sumiso.