Con el toque de queda las citas gay son complicadas y los chicos pasivos están cada vez más necesitados. Con la familia ocupando la casa las 24 horas del día, no es fácil organizar una cita para ligar. Pero el deseo de chupar una gran polla y ser follado poderosamente es muy fuerte. Afortunadamente, en todas las ciudades hay un escondite que utilizan los granujas y los traficantes de as para follarse a sus chicas. En uno de esos rincones Mathieu tiene una cita con Etalon. Los dos tipos no hacen las cosas a medias. Etalon prepara el agujero del joven hipster con su lengua, y luego le mete su gran polla en el culo. La sensación es fuerte y "anal", esta gran polla de un joven semental le duele el culo, pero también le hace sentir muy bien. Mathieu quiere entregarse, ofrecer su culo aún más, someterse a esa gran polla.